16 abril, 2011

La Ley soñada


Soñé que había fiesta anoche en el infierno,
que te pedía un baile el mismísimo diablo,
que buscabas tu deseo en su cuerpo encendido
y, volviendo la cara, agarraste mi mano...

...di, mientras te busque, que me encontrarás,
que seré yo, mientras huyas, a tu lado un fugitivo.

Y mintamos después a Platón y a Pessoa:
que ni todo son sombras,
ni solo las palabras quedan...

...ni hay siquiera cuerdas
que aten nuestro destino.

No hay comentarios: